Vuelta a Barcelona y Cataluña con Miquel Izard

Veo hacia atrás, y recuerdo mi última estancia en España. Entonces me doy cuenta de que no solo soy una dichosa mujer porque puedo realizar mi sueño de viajar y comprender más sino que además puedo hacerlo en compañía de personas mayúsculas, excelsas y amorosas. Sí, es el caso de mi estancia en Barcelona y Costa Brava, en compañía de uno de los mejores historiadores de la Cataluña y ¡hasta de Venezuela!: Miquel Izard.

 Así las cosas: me recibió Izard en Barcelona, y se comportó de manera tan amable, que lucho y lucho por no deshacerme en palabras dulces y que suenen exageradas, ¡pero que no lo son! Me trató súper bien al llevarme no solo a reconocer esa parte de la Barcelona en la que yo quería andar, como el Hospital de Sau Pau, la Sagrada Familia o sus playas, también me convidó de llevarme a conocer distintos mercados y espacios muy cotidianos para los barcelonetes, pero no tanto para los turistas.

Así sucedió al llevarme a pasear y conocer pequeños poblados en la Costa Brava. Fuimos a zonas arqueológicas griegas, romanas y catalanas como Empodia

o poblados e iglesias medievales, a recorrer la playa, a comer por aquí y por allá. Me sentí más que feliz cuando conocí los Alcornoques o los árboles de corcho, o las Acacias, luego vi un paisaje hermoso, como Begur y sus horizontes de ensueño.

La conexión con el historiador también fue, de hecho, mediante la historia. Así que fuimos a la Carbonera donde obtuve una visita guiada que me mostró el sistema tradicional de obtener carbón y me acercó al maestro de vida de Izard, Lluis, de nuevo a Gracia en Barcelona o La Bisbal, aquella población de donde emergió la familia de mi querida maestra Margarita Carbó Darnaculleta (+) -quien me dirigió mi tesis de maestría, y fue gran amiga de Izard, lo que implicó que la conexión se dimensionó de una nueva forma para mí.

Agradezco con el alma esta oportunidad de estar, nuevamente, en Barcelona con Miquel Izard. Me la debía, y fue tan espectacular que llevo dentro de mi corazón sus palabras, sus "cuentos" y su entrega apasionada a todo lo que hicimos.

PD. Gracias también a ustedes, Lila Centeno y José María, pareja de vasco-venezolano-catalanes que me entusiasmó por su apoyo a mi forma de ser y vivir. Petons, petons!!! Moltes Merces!!