¿Jaguares salvajes en México? Sí, yo también creía que era un sueño, una utopía.
Por eso, todo resultó complicado. Como sucede en el camino para encontrar las verdaderas joyas, tuve muchas desorientaciones, pistas falsas y engaños. No me pareció extraño que el mediador, el agente de viajes de Chiapas, se aprovechara de esta situación y nos estafara. El puente para llegar a la verdadera y guarecida selva estaba oxidado.
Aún así, yo como coordinadora de un grupo de doce guerreros y el maestro Antonio Iborra pasamos momentos increíbles en un lugar excepcional: la finca ecoturística y de conservación Arroyo Negro, en el municipio La Concordia, dentro de la Reserva de la Biósfera El Triunfo, Chiapas.
Se me abrió el mundo, ¡qué decir mundo!, se me abrió la galaxia al conocer una selva de verdad, con sus olores, texturas, colores, sonidos y emanaciones que me hicieron vibrar innumerables veces. Me sentí parte de ella porque, como bien nos lo dijo nuestro maestro, no somos extraños, somos parte de la selva. Aunque yo sea citadina, aunque sea chilanga. Sí, sentí la conexión.
El contacto con los reinos mineral, vegetal y animal en esa región despertó un interés inimaginable por el otro, que soy yo misma. Llorar al ver a Ak-bal enjaulado -un jaguar negro sudamericano sobreviviente de Xcaret- pero comprender las razones y ventajas de este cautiverio, el placer de conocer a Petunia, una pecarí cachorra llena de pulgas que murió a los pocos días, escuchar al Pavón real, endémico de El Triunfo, ver guacamayas rojas -y sorprenderme de que una de ellas sea nombrada Ilihutsy, supuestamente-, así como contactar con varios reptiles o mosquitos, trastocó mi perspectiva.
La convivencia en esos días fueron excelsos, porque el grupo se adaptó a las condiciones de templanza que se nos presentaron: calor en Tuxtla y el paseo en lancha del Cañón del Sumidero; frío, calor y mosquitos en la selva; frío y humedad en San Cristóbal de las Casas. ¡Todos los escenarios posibles para forjar el espíritu! YugDo, asanas y meditación fueron los métodos de alquimia.
Finalmente, la Operación Jaguar se trasladó a Morelia y a la Ciudad de México. Convivencia, Yugdo, talleres y terapias fueron, como siempre, el inicio y el broche de oro, oro que es mi plomo transformado por esta disciplina que es, definitivamente, muy mía.
Si estás interesado en asistir a Arroyo Negro, contacta con Efraín Orantes. Tel. +5219613303763
FB /EcoFinca.ArroyoNegro
Y si estás interesado en practicar Yug Do, visita http://yugdomexico.blogspot.mx/, FB/YugDoMexico
Tenemos grupos entrenando en los siguientes puntos:
Ciudad de México.
-Centro Cultural Universitario, Ciudad Universitaria, a un lado de la Hemeroteca Nacional, 3 pm, lunes a viernes.
-Parque Pilares (o Arboledas), Del Valle, bajo la carpa y los murales de los danzantes, 6 am, lunes, miércoles y viernes.
-Parque Viveros, Coyoacán, calles Acequia y Cedro, 8 am, domingos.
-Desierto de los Leones, Portillo, 9 am, sábados.
Morelia, Michoacán.
-Planetario, 8 am, martes y jueves.
Acapulco, Guerrero.
-Instituto Carl Rogers, 7 pm, martes y jueves.
También hay entrenamientos en Quito, Ecuador; Tenerife, Islas Canarias, Barcelona, Catalunia y Sevilla, Andalucía en España. ¡Súmate!
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